Declaración de Ávalos y Koldo enciende las alarmas en la Audiencia
Declaración de Ávalos y Koldo ante el Tribunal Supremo genera una tormenta judicial sin precedentes. Ambos permanecen retenidos en la sede del alto tribunal desde hace más de dos horas, desatando especulaciones sobre una posible orden de prisión provisional.

Según fuentes cercanas a la causa, el magistrado instructor Leopoldo Puente mostró un enfado inusual, tras percibir un evidente cambio de estrategia por parte de los imputados. En lugar de colaborar con la justicia, Ábalos y García optaron por negar cualquier implicación y, literalmente, “no reconocerse en los audios” que forman parte del sumario. Esta actitud, calificada como obstruccionista por varias partes personadas, habría colmado la paciencia del juez.
Cambio radical en la defensa y sospechas sobre presiones internas
La jornada se tornó aún más inquietante cuando trascendió que el domingo previo, los abogados de ambos acusados mantuvieron una reunión privada que desembocó en un giro de 180 grados en su defensa. Hasta ese momento, Ábalos había mostrado cierta disposición a colaborar con la Fiscalía Anticorrupción. Sin embargo, tras ese encuentro con Koldo y su letrado, se alineó con una estrategia de silencio y negación absoluta.
Diversos analistas apuntan a que Koldo podría poseer material sensible que afectaría directamente a personas del entorno personal de Ábalos, incluidos sus propios hijos. Este elemento habría sido clave para frenar cualquier intento del exministro de “tirar de la manta”.
Un juez desbordado y la UCO bajo presión política
La indignación del juez Puente se intensificó cuando ambos acusados se limitaron a repetir declaraciones evasivas, incluso cuestionando la autenticidad de los audios incorporados por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Esta deslegitimación, no solo de las pruebas, sino del trabajo de los investigadores, ha provocado una reacción especialmente dura por parte del magistrado, quien optó por mantenerlos en sede judicial mientras redacta los autos.
Fuentes jurídicas consideran altamente probable que estos autos incluyan una orden de prisión provisional, atendiendo al riesgo de fuga, destrucción de pruebas y reiterada falta de colaboración.
Todo ello se produce en un clima de tensión institucional, en el que el Gobierno es acusado de intentar influir en el devenir de las investigaciones. En particular, se ha denunciado que el Ejecutivo estaría maniobrando para relevar a mandos clave de la UCO, lo que ha encendido todas las alarmas sobre la independencia judicial.
Declaración de Ávalos y Koldo: ¿Y ahora qué? Sánchez, en el punto de mira
La situación judicial de Ábalos y Koldo se agrava, y cada vez más miradas se centran en el presidente Pedro Sánchez. Él contó con ambos como colaboradores directos y piezas clave de su círculo de confianza.
Aunque Sánchez ha negado rotundamente conocer los hechos investigados, los indicios acumulados y el contexto político generan una sombra de sospecha difícil de disipar. “Si Ábalos se hunde, no lo hará solo”, advierten fuentes próximas al caso.